Restauración de tallas, esculturas y retablos.
Nuestro objetivo principal es devolver a la obra escultórica su unidad estética, respetando siempre la concepción y creatividad del artista. “Reconstruir sin inventar” basándonos siempre en un estudio previo, respetando posibles intervenciones anteriores que se consideren históricas y respetando siempre la pátina del tiempo.
Conservación: Proceso fundamental y básico en cualquier obra escultórica de cualquier material, que se llevará a cabo previamente a cualquier tratamiento posterior como limpiezas, reintegraciones volumétricas, cromáticas, etc., y en ocasiones como proceso único de restauración.
Este proceso consiste en frenar en lo posible el deterioro de la obra, fijando y protegiendo todo lo que aún se conserve de ella. Es habitual la fijación o sentado de las diferentes “capas” que conforman la obra; estuco, bol, hoja de oro, policromía, etc.
Otros tratamientos necesarios serían la eliminación de xilófagos y otras plagas, el refuerzo estructural o la consolidación del material que forma el Alma de la obra
